Pulsómetro Febrero 2014
Políticos: “corruptos” que no defienden el interés de la ciudad
«Corruptos” es la palabra que usan con más frecuencia los barranquilleros para calificar a los políticos locales, quienes, a juicio de los ciudadanos, no defienden los intereses de Barranquilla ante la Administración central.
Así lo revela la tercera encuesta realizada por el Pulsómetro de EL HERALDO e Inpsicon, que destaca además que la mayoría de los ciudadanos desconoce los nombres de sus gobernantes y legisladores locales. El sondeo también arroja datos sobre el grado de implicación de los barranquilleros en el Carnaval (el 36% no participará) y lo que en su opinión constituye la clave del éxito de las fiestas.
Luego de entrevistar a 406 personas mayores de edad de los seis estratos y de las cinco localidades, el Pulsómetro revela que el 86,2% de los encuestados dan, en respuesta abierta, calificativos negativos a los políticos y el 84% considera que ninguno defiende a Barranquilla en Bogotá
Al consultar si conocen a algún funcionario de la Alcaldía, excluyendo a la alcaldesa Elsa Noguera, el 97% no responde o dice no conocer a ninguno, mientras que solo el 3% atina a citar un nombre, que en más de una ocasión ni siquiera ocupa cargos en la administración. En la Gobernación, la cifra de los que no saben o no responden aumenta en dos puntos con relación a la Alcaldía, o sea que está en 99%, y sólo el 1% cita algún nombre.
En el Concejo y la Asamblea las cifras no varían mucho. El 98% y 99%, respectivamente, de los barranquilleros no es capaz de citar a algún miembro de estas corporaciones públicas. Lo mismo ocurre con la Policía: el 99% no conoce a ninguna autoridad de la institución policial.
Cuando se interpretan los resultados que las encuestas nacionales y locales han dado sobre la intención de votar en blanco, el 40,9% de los encuestados lo interpreta como una inconformidad con el sistema político y el 27,8% como descontento con los candidatos.
En el capítulo de calidad de vida, el 87,20% de los barranquilleros considera que la familia es “muy importante” para su felicidad. Le siguen la salud (72,9%), el trabajo o estudio (61,7), la estabilidad económica (55,6%) o la religión (46,8%)
Se reiteran los hallazgos de los anteriores Pulsómetros y se vuelve a encontrar que el mayor porcentaje de los encuestados atribuye a la familia un papel preponderante para su bienestar personal y su felicidad.
La familia aparece, de lejos, en el primer lugar cuando se pregunta a los encuestados (con respuesta espontánea) qué salvaría si un arroyo se fuera a llevar por delante su casa. El 70,4% contestó automáticamente que salvaría a su familia. Las demás respuestas se refieren a objetos como dinero y joyas, camas y colchones, ropa, televisor o celular. Llama la atención que las mascotas aparecen en sexto lugar de la lista.
A la pregunta sobre las razones de la falta de cultura ciudadana, los encuestados citan, también mediante respuesta espontánea, en primer lugar la “falta de educación” (un 22,3%), Seguidamente la atribuyen a la “flojera” (12,7%), “falta de solidaridad” (11,5%) y la “mamadera de gallo” ( 11,4%). Solo una minoría muy reducida achaca el problema a falta de autoridad.
Un dato llamativo es que a Barranquilla está llegando gente de otras regiones del país y del mundo. Los encuestados lo atribuyen mayoritariamente a que los inmigrantes buscan una oportunidad laboral o de desarrollo económico, o porque la perciben como una ciudad acogedora. Apenas un 2,5% cita el TLC como factor de atracción para los nuevos residentes, pese a que el discurso oficial subraya insistentemente los beneficios que supuestamente recibirá Barranquilla como foco de atracción por cuenta de los tratados de libre comercio suscritos por Colombia con un amplio abanico de países. Son también muy pocos los encuestados que creen que la motivación de los que se instalan en la ciudad son sus habitante so la diversidad cultural de la ciudad.
El Pulsómetro incluye un apartado dedicado al Carnaval, que se celebrará en barranquilla los próximos 1 a 4 de marzo. La encuesta indaga la expectativa de participación en la que es considerada la fiesta popular más importante de Colombia y el resultado es que el 36,0% de los encuestados manifiesta que no participará en la fiesta. Un 50,1% dice que lo hará como “consumidor”, otro 7,2% como “prestador de servicios” y el 5,4% intervendrá como “hacedor”, es decir, se involucrará personalmente en alguna d elas actividades de la fiesta.
Para los barranquilleros, el éxito del Carnaval dependerá sustancialmente de la seguridad, según lo afirma un 35%;, del control del exceso de alcohol, espuma y otros, un 16%, y de la buena organización de los desfiles (el 15%).
El trabajo de campo del Pulsómetro fue realizado entre el 13 y el 18 de febrero, con el Carnaval y las elecciones al Congreso en el horizonte inmediato. La fiesta se celebrará entre el 1 y el 4 de marzo, mientras que los comicios al Senado y la Cámara están convocados para el 9 del mismo mes.
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